¿Qué Hacemos?

Espiritualidad

  1. Vida de oración: toda la vida cristiana encuentra su fundamento en la oración, que es nuestra relación de amistad con Jesucristo. Sin la oración no podemos conocer la voluntad de Dios ni obtener las fuerzas para cumplirla. De aquí que en Las Voces del Verbo siempre remarcamos la importancia de la oración en todas nuestras actividades, enfatizando el rezo del breviario, la adoración eucarística, las confesiones y en particular la Celebración de la Santa Misa. Para proclamar a Jesucristo es necesario estar imbuido de Él a través de la oración.
  2. Ejercicios Espirituales: Los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola son una secuencia ordenada de meditaciones y contemplaciones cuyo objetivo es ayudar en el discernimiento de la voluntad de Dios. Son días de retiro en silencio en los cuales se medita y se reflexiona sobre Dios, el hombre y la determinación por ser santos, bajo la guía de un sacerdote o religioso. Convencidos de la importancia que estos Ejercicios han tenido y tienen en la vida de los santos, los ofrecemos a todos los miembros de Las Voces del Verbo como herramienta segura para la propia santificación.
  3. Consagración mariana: Como parte de la Familia Religiosa del Verbo Encarnado, nosotros también somos “esencialmente marianos”. Y para expresar nuestro amor y gratitud a la Santísima Virgen y al mismo tiempo obtener su ayuda indispensable para nuestro fin propio, buscamos consagrarnos a Ella en materna esclavitud de amor según las enseñanzas de San Luis María de Montfort. Totus tuus, María!

Apostolado

Hoy más que nunca, tenemos la urgencia de predicar a Jesucristo y de evangelizar la cultura, impregnando todo lo auténticamente humano con el mensaje de Nuestro Señor, para que Él reine. Las Voces del Verbo se comprometen a trabajar en esta labor, procurando que sus miembros sean apóstoles de Cristo en todo lugar y en todo momento, en sus actividades diarias y en el mundo que les toca vivir. Para ser sal de la tierra y luz del mundo, ya sea en el trabajo, en la universidad o en la propia familia.

Asumimos especialmente los apostolados propios de nuestra Familia Religiosa, tales como:

Frente a la “cultura de la muerte” que promueve el aborto, la eutanasia, y otros tipos de ideologías, fomentamos una auténtica “cultura de la vida”, que defiende a los niños por nacer y apoya a la familia natural. Participamos de marchas provida y buscamos fundar la “civilización de amor”.

A través de cursos y congresos, nos preparamos para desenvolvernos correctamente en el ámbito apologético, dando razones sólidas de nuestra fe y de nuestra esperanza. Publicamos artículos y organizamos encuentros para mejor conocer los fundamentos del catolicismo.

Sopesando la importancia y la eficacia de estos Nuevos Areópagos, hacemos uso de estos medios de comunicación para poder difundir el Evangelio especialmente entre los jóvenes. Producimos videos apologéticos e informáticos, así como cursos en línea, etc.

Los pobres y los que sufren representan de un modo más particular al Hijo de Dios, que a su vez fue pobre y sufrió en la Cruz. Por eso damos preferencia a los trabajos de voluntariado, poniéndonos a disposición de los más necesitados, visitando hospitales, asilos de ancianos, orfanatos, etc.

Organizamos también misiones populares para fortalecer la fe de los bautizados y llevar a otros a Cristo. Visita de casas, juegos con niños, catecismo y administración de los sacramentos, son algunas de las actividades que se llevan a cabo en una misión popular. 

La Eutrapelia

Una nota distintiva de los jóvenes de Las Voces del Verbo deber ser la alegría. Alegría que brota de la vida virtuosa, ya que ambas van siempre de la mano. Como toda manifestación auténticamente humana debe ser transformada con la fuerza del Evangelio, así como Cristo quiso asumir toda la naturaleza humana exceptuando tan solo el pecado, por eso fomentamos actividades deportivas y recreativas que nos permitan tener un alma sana en un cuerpo sano y nos otorguen un ambiente de sana y santa diversión, que es la virtud que se conoce como “eutrapelia”.
Además de la práctica de diversos deportes, la realización de excursiones y otras actividades físicas, damos también a los campamentos una importancia particular puesto que ellos son “una escuela de vida”.